Después de un parón que nos ha obligado a realizar la actividad lectiva de forma online por la erupción volcánica en Cumbre Vieja, hemos regresado a las aulas.

Como siempre comentamos, en nuestra propuesta pedagógica damos mucha importancia a la educación emocional por lo que está presente en todas las situaciones de aprendizaje que diseñamos. En esta nueva situación que nos está tocando vivir, y que ha hecho que a las medida covid tengamos que sumar nuevas medidas por fenómenos volcánicos, su trabajo se hace más necesario.

Al volver a clase, diseñamos varias actividades para trabajar las emociones. Entre ellas hemos querido abordar el miedo, aquella emoción que nuestro amigo El Monstruo de colores pinta de negro. A partir de una caja de zapatos construimos nuestro monstruo come miedos. Después de charlar sobre lo que estábamos viviendo y expresar como nos sentíamos, cada niño/a dibujó sus temores para seguidamente dárselos de comer al monstruo.

Les dejamos algunas fotos de lo trabajado.